Este círculo de asociaciones por una automoción sostenible en España está compuesto por la Asociación Española de Renting de Vehículos (AER), la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (AEDIVE), la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (ANESDOR), la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), la Asociación Nacional De Fabricantes De Carrocerías De Autobuses (ASCABUS), la patronal de concesionarios españoles (FACONAUTO), la Federación Nacional Empresarial de Alquiler de Vehículos Con y Sin Conductor (FENEVAL), la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (GANVAM) y la Asociación Española de Proveedores de Automoción (SERNAUTO), cuya constitución se establece además con la firma de un Manifiesto a favor de la descarbonización.
Las asociaciones son conscientes del desafío que supone para España y Europa la lucha contra el cambio climático y los compromisos que se han fijado desde Bruselas para que Europa sea el primer continente climáticamente neutro del mundo de aquí a 2050. Este reto y la transición a este modelo ha de servir, además de para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y el cuidado del planeta, para reforzar la competitividad y las capacidades económicas de España, a través de una transición económica inclusiva que aproveche las oportunidades manteniendo las fortalezas económicas e industriales.
Así, el sector de la automoción es clave para cumplir este doble objetivo, no solo por su responsabilidad en cuanto a las emisiones de CO2 (el transporte por carretera es el principal emisor de GEI, con el 26,8% del total) sino también por el potencial y fortaleza de su cadena de valor, que representa el 10% del PIB en España y emplea al 9% de la población activa.
De Izq. a der: Arturo Pérez de Lucia, director general de AEDIVE; Jaime Barea, director corporativo de GANVAM; José López-Tafall, director general de ANFAC; Juan Luis Barahona, presidente de FENEVAL; Marta Blázquez, vicepresidenta ejecutiva de FACONAUTO; José María Riaño, secretario general de ANESDOR; José Martín Castro-Acebes, Presidente de AER y José Portilla, director general de SERNAUTO. El secretario general de ASCABUS, Agustín Gómez Pereira, acudió virtualmente a la sesión.
Es por ello que las asociaciones firmantes, conscientes de esta oportunidad y del reto que supone, se comprometen a trabajar juntos en estos propósitos. “Nuestro objetivo es contribuir a conseguir que España alcance la neutralidad climática en 2050 y cumpla los objetivos intermedios precisos, manteniendo su posición como referente económico e industrial mundial. Para ello, todos los agentes que conformamos la cadena de valor de automoción impulsaremos y apoyaremos decididamente la descarbonización de la movilidad/automoción y la adopción de medidas y estrategias que permitan a nuestro país avanzar con paso firme en la fabricación y comercialización de los nuevos vehículos libres de emisiones, el desarrollo de la electrificación, así como de otros combustibles limpios o el impulso de nuevos servicios de movilidad. Un modelo que, además, propicie un marco idóneo para la creación de empleo e inversión, que genere oportunidades económicas para nuestros ciudadanos y trabajadores y contribuya a mejorar su calidad de vida”, aseguran los firmantes en el Manifiesto de su constitución.
De este modo, las nueve asociaciones se comprometen a:
JUGAR un papel clave para consolidar y hacer crecer un sector extendido de automoción español competitivo, descarbonizado, eficiente y sostenible para todos los ciudadanos.
INVERTIR en desarrollar y transformar nuestro sector, impulsando la descarbonización y la digitalización, priorizando el reforzamiento de nuestra competitividad y puestos de trabajo y maximizando la creación de valor en nuestro país.
TRANSFORMAR la movilidad, incentivando el desarrollo de nuevos servicios y tecnologías, y también nuevas herramientas de relación con los clientes y con la sociedad.
INNOVAR para aprovechar las nuevas oportunidades y conseguir que el nuevo sector de la automoción español mantenga su posición de liderazgo a nivel europeo y su relevancia económica.
COLABORAR lealmente con las administraciones y reguladores en el desarrollo del cambio, aportando una visión leal, consensuada y fundada del sector, desde el apoyo y compromiso pleno con los objetivos de descarbonización de nuestro país.
Pero en todo caso, las asociaciones son conscientes de que, pese a todos sus esfuerzos, los objetivos no se pueden llevar a cabo sin políticas activas de impulso al cambio. Así, consideran fundamentales proponer los siguientes principios y medidas:
Transición progresiva hacia un modelo descarbonizado dentro de las sendas marcadas por Europa, para permitir que los operadores alcancen los objetivos de la forma más eficiente, con plazos que incentiven las decisiones de inversión.
Enfoque consensuado entre las fuerzas políticas y administraciones, más allá de los ciclos políticos, en el horizonte 2030 y 2050.
Estrategia productiva y de capital humano específica para la cadena de valor del sector, que fomente el mantenimiento y modernización de los activos industriales y de servicio del país, así como la adaptación y capacitación de los trabajadores.
Fortalecimiento de la pequeña y mediana empresa española, en su camino hacia la digitalización y la descarbonización de productos y servicios.
Enfoque específico a la I+D+i del sector dentro de la política de apoyo, coherente con su relevancia económica.
Instalación de una red extensa de infraestructuras de los nuevos combustibles. En concreto, es imprescindible generalizar la recarga eléctrica, tanto en el entorno municipal como en las redes de largo recorrido. Estas infraestructuras deben priorizar la interoperabilidad y la recarga ultrarrápida. Esta disponibilidad de infraestructuras ha de conseguirse también para los restantes combustibles alternativos sin emisiones netas, especialmente para los vehículos de transporte pesado.
Toda tecnología que contribuya a alcanzar los objetivos marcados es deseable. La mejor tecnología disponible, entendida según la normativa comunitaria como aquella más eficaz, práctica y avanzada que, en condiciones económicas y técnicamente viables permita alcanzar los más altos niveles de protección del medio ambiente (o la neutralidad climática), es positiva.
Las medidas de apoyo han de buscar como objetivo la reducción de los objetivos de descarbonización en el marco temporal marcado.
Necesaria renovación del parque. La descarbonización de la movilidad necesitará de políticas activas para retirar los vehículos más emisores. Esto exigirá impulsar esquemas de incentivos y políticas de movilidad para ayudar a la renovación.
Implicación de la sociedad. Es conveniente que el consumidor sea un agente activo en el proceso de descarbonización a través del impulso de servicios innovadores en movilidad, especialmente en lo relativo a modelos de recarga eléctrica y autoconsumo, que, a través de incentivos tangibles, promuevan la concienciación y el uso responsable de las nuevas tecnologías.
Un sistema fiscal más verde para conseguir los objetivos de la descarbonización, promoviendo la introducción de nuevas tecnologías con coherencia social y territorial.
Con carácter general, ha de buscarse la eficiencia regulatoria y evitar el exceso de medidas para cumplir los mismos objetivos.
“Las asociaciones firmantes creemos firmemente que este es el momento adecuado para impulsar una movilidad limpia y alcanzar los objetivos temporales tanto de descarbonización como económicos de un modo que maximicen el beneficio para nuestra sociedad y economía. El consenso y el trabajo en común serán fundamentales en este esfuerzo de largo plazo y es por ello, que entendemos que este círculo de asociaciones es un paso muy relevante para avanzar en la descarbonización, manteniendo la industria y el empleo e impulsando la innovación”, afirman.