Porsche desarrolla diversas formas de recarga para su modelo eléctrico Taycan

Gracias a su innovadora tecnología de 800 voltios, evolucionada en los prototipos vencedores de las 24 Horas de Le Mans, Porsche ha podido resolver los dos aspectos que más reticencias generan de los coches eléctricos: la autonomía y la recarga. En este sentido, el Taycan puede recorrer unos 500 kilómetros de un tirón, una distancia más que suficiente para la mayoría de los conductores. Además, las baterías pueden almacenar energía para 400 kilómetros más, aproximadamente, con una recarga de sólo 20 minutos en un turbocargador, y para 100 kilómetros en solo cuatro minutos. Gracias a ello, para un viaje entre Madrid y Gerona (700 kilómetros) sólo se emplearía un 10% más de tiempo que en un modelo con motor de combustión.

Pero Porsche ha ido más allá. Porque además de llegar más lejos y de poder cargar en menos tiempo, el éxito de los coches eléctricos también depende de que se puedan recargar en muchos sitios (con una infraestructura bien dimensionada de puntos de recarga) y de forma cómoda (con un cargador sencillo, un único sistema de pago, facturación unificada, un precio garantizado de la electricidad o con reserva del punto de recarga).

La velocidad de carga depende del voltaje

En la actualidad, las estaciones de carga rápida para coches eléctricos funcionan con una tensión de unos 400 voltios y una potencia de carga aproximada de 50 kilovatios, lo que supone un tiempo de carga de unos 80 minutos para tener 400 kilómetros de autonomía. Si se aumenta la potencia de esta estación a unos 100 kilovatios, capacidad máxima que soportarían las clavijas del conector, ese tiempo se reduciría a unos 40 minutos. Para poder aumentar aún más la potencia de carga se necesitan nuevos conceptos de refrigeración. En la actualidad, varias empresas están trabajando paralelamente en este tipo de sistemas. El uso de enchufes de carga refrigerados permite aumentar la potencia de carga de las estaciones de 400 voltios y conseguir un tiempo de carga de unos 30 minutos para 400 kilómetros de autonomía.

Pero está claro que es inevitable aumentar el voltaje para lograr tiempos de carga aún más bajos. Si se duplica la tensión a aproximadamente 800 voltios, el tiempo de carga para conseguir 400 kilómetros de autonomía podría reducirse teóricamente a unos 15 minutos con la misma carga eléctrica en las clavijas del conector.

Desarrollo de infraestructura propia, y diferentes acuerdos para puntos públicos y privados

En la era de los motores de combustión, los fabricantes de automóviles nunca se preocuparon por el suministro de combustible, que quedó en manos de las compañías petroleras. Pero con la llegada de la electrificación nos enfrentamos al dilema del huevo y la gallina: “Si no hay red de carga, no hay vehículos eléctricos. Y si no hay vehículos eléctricos, nadie invertirá en una red de carga. Así que sólo podemos vender coches eléctricos si damos a los clientes la seguridad de que hay una red de carga disponible”, asegura Michael Kiefer, Director de Sistemas de Alta Tensión en Porsche Engineering. “Con el Taycan, estamos dando forma al futuro de la movilidad eléctrica a todos los niveles", afirma Detlev von Platen, miembro del Consejo de Dirección de Porsche AG como responsable de Ventas y Marketing. "Esto incluye un ecosistema inteligente, con opciones de carga coordinadas tanto en casa como fuera”.

Las infraestructuras de carga van a experimentar un crecimiento exponencial en los próximos meses y Porsche está trabajando para ofrecer a los propietarios de un Taycan una solución integral, con otros puntos que complementen a los que instalen la Administración Pública y otras empresas privadas.

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